¿Tienes la sensación de que las mujeres sienten menos afición por los juegos de azar que los hombres? Lo más probable es que sí. De hecho, si piensas en los de casino, probablemente te reafirmes en tu pensamiento. Sin embargo, ¿es una realidad o solo pura imaginación? Aquí vamos a descifrar todo lo relacionado sobre esta cuestión y sobre si es cierto que las mujeres, cuando juegan, prefieren hacerlo a las cartas.
El entorno
Si nos atenemos a los juegos de cartas de casino y a todos aquellos que forman parte de estos establecimientos y de los operadores que los ofrecen a través de sus plataformas web, no tardarás en darte cuenta de que la mayor parte de la publicidad se enfoca en el género masculino, no en el femenino. De hecho, a pesar de que cada vez se tiende a incluir más a las mujeres en sus anuncios, aún no es habitual, por lo que quedan ligeramente apartadas.
Además, las mujeres suelen, por lo general, ser más realistas que los hombres, motivo por el que no acostumbran a hacerse esperanzas respecto a la posibilidad de ganar grandes sumas de dinero jugando a las cartas o a cualquier otra disciplina de casino. Por su parte, muestran su competitividad de otra manera diferente a los hombres. Por ejemplo, seguro que alguna vez tu pareja no ha comprendido por qué te has enfadado tanto por perder una partida de parchís con tus amigos, pero seguro que te ha recriminado si has suspendido un examen o no lo has hecho bien en una entrevista de trabajo.
Tampoco hay que olvidar que los hombres, cuando se enfrentan en un juego de cartas que consideran típicamente (y equivocadamente) masculino como es el poker, suelen tratarlas con condescendencia durante la partida. De hecho, hasta es habitual que se sientan avergonzados si pierden porque ‘les ha ganado una chica’. Cuando este pensamiento desaparezca, mejoraremos como sociedad y, seguramente, las mujeres empezarán a sentirse más atraídas por este tipo de juegos.
Entonces, ¿prefieren o no las cartas?
Puestos a jugar, la mayoría de las mujeres prefiere invertir su tiempo jugando a las cartas que en ruletas o máquinas tragaperras. Sin embargo, hay algunos condicionantes. Y es que, por lo general, prefieren entornos más tranquilos en los que disfrutar de la partida como, por ejemplo, en casa de sus amigas para matar el aburrimiento o realizando apuestas con valor simbólico solo para darle emoción.
A pesar de ello, esto no es, ni mucho menos, una regla escrita o no respecto a las mujeres y los juegos de cartas. Como es obvio, cada una es ‘de su padre y de su madre’, como se dice popularmente, por lo que seguro que leyendo estas líneas hay más de una que no se siente nada identificada con lo que aquí acabamos de escribir.
En definitiva, no importa si a las mujeres les gusta o no más las cartas que otros tipos de juegos de casino. Lo que de verdad es relevante es pasarlo bien en cada partida.